Beber una copa al día mejora la concentración, estimula la memoria y te protege de dolencias mentales.
¿Sabes por qué?
La vitamina B en una copa de vino tinto potencia el sistema cognitivo, estimulando la memoria. Mejora la oxigenación y el flujo sanguíneo cerebral y la conexión entre zonas con recuerdos de corto plazo, actuando como atenuante de enfermedades como el Alzheimer.
Consumir responsablemente y en forma regular es bueno para la salud.